TURBOCRÓNICAS
El Diablo con tenis
De súbito el Diablo aparece en el restaurante de plástico y Feldespato cierra el libro y se dispone a escuchar un monólogo cuajado de verbos expansivos. Le agrada el enfoque peculiar del Diablo, excepto cuando filosofa. Todos filosofan con la edad, dice Thomas Bernard. Pero este Diablo con tenis ha filosofado desde siempre. Ahora decepciona a Feldespato una inferencia desatinada del Demonio. Años atrás, hubiera sido sólo otra imperfección. A sus parrafadas filosóficas habría sumado el desatino y punto y se acabó. Ni siquiera el Diablo es perfecto y quizá en su caso echó a perder la frase trillada según la cual sabe más el Diablo por viejo y no por Diablo. La decepción provino porque ya escribe novelas y uno de mil requisitos es que el narrador se ponga en los zapatos de los otros.
Feldespato estaba escuchando mal sus parrafadas y le pidió una vez, dos, repetirla. Feldespato se siente incómodo charlando con sordos y, poniéndose en los tenis del Diablo, iba a sugerirle que hablara de frente. Pero el Diablo se le adelantó. Afeitándote los pelos de la oreja, escucharías mejor, le dijo a Feldespato con sarcasmo punzante. Como parte de sus pendientes, Feldespato iba a ir a la peluquería. Él se fijaba en esos vellos desde la secundaria cuando tuvo una novia irónica. Te van a decir el Oreja Peluda, dijo la mujeruca. Desde entonces... ¿Estaba el Diablo perdiendo capacidad de observación y acaso el oído derecho? Por la puerta abierta entraba el atronador sonido del cilindro, le respondió, y él insistía, al hablar, en volverse hacia su izquierda. ¿Cómo escucharlo así? ¿Eh?, contestó Satanás.
Luego hablaron de su novela. El Diablo estaba en el punto en el cual debía ubicar en cuáles sitios emitirá su personaje principal un monólogo interno permanente. Ahí donde esté, le dijo Feldespato. Si el ser humano genera de cuarenta mil a sesenta mil pensamientos al día, los tiene hasta dormido. Espero que ese personaje no esté sordo, se dijo Feldespato, y si es alter ego del Diablo entonces emitirá ciento veinte mil pensamientos, incluso mientras engulle cuernos rellenos de jamón industrial y de queso de harina, el desayuno de este Diantre con tenis. Con sólo ese personaje, necesitaría tres tomos, sin diálogos ni descripciones ni acción. Puro flujo de conciencia.
GARBANZOS DE A LIBRO
Sándor Márai
“El enemigo real es la derecha,
hipócrita y mezquina”
El escritor húngaro Sándor Marái (1900-1989) opinaba que el comunismo “es una tragedia, pero el enemigo real son siempre los hipócritas, mezquinos, disfrazados de nacionalistas: la derecha”. Sin embargo, escribió desde la edad media la burguesía ha sido “el catalizador que impulsa el progreso y el desarrollo de masas”. En cuanto a la libertad de expresión consideraba que los gobiernos la necesitan porque es una condición que establecen los bancos mundiales. También que los síntomas de la corrupción han sido siempre los mismos en todas las épocas, pero ahora se sabe rápido “de qué va la cosa”. Al precisar que la libertad es un asunto privado, afirmaba que no existe la libertad institucional, sino que el ser humano puede alcanzarla por poco tiempo y con tenacidad. Después de autoexiliarse, la mayor parte del tiempo en Estados Unidos, declaró que la mayor satisfacción ha sido poder escribir sin autocensura. Estos puntos de vista figura en su libro “Diarios 1984-1989” (Salamandra).
LOS GARBANZOS
A propósito de los 20 años de muerto del escritor austriaco Thomas Berhnard se publica “Mis premios” (Alianza), libro póstumo en el que declara: “No estoy dispuesto a rechazar veinticinco mil chelines, decía, soy codicioso, no tengo carácter, yo también soy un cerdo”... “... no he tenido nunca ninguna clase de pudor literario”, declaró el escritor español Eduardo Mendoza al presentar su libro “Tres vidas de santos” (Seix barral), “hago lo que me gusta y ahí va; o sea, que si lo próximo me da por la novela rosa...”... Paloma Sáiz renunció a la Feria Internacional del Libro en el zócalo y al programa Fomento a la Lectura, después de que el gobierno del DF decidió, sin hacer un estudio de costos, al suspender la Feria para un mitin de electricistas y porque le redujeron el presupuesto... Acuse de recibo: “El Búho”, que dirige René Avilés Fabila, número 112, octubre 2009, con las firmas de Luz García Martínez, Ulises Velázquez, Jorge Bravo, Roberto Bravo, Luis Fernando Escalona, Guillermo Samperio, Enrique Gastélum, Roberto Bañuelas, Martha Figueroa de Dueñas, María Teresa Castrillón, David Figueroa, Eve Gil, Roberto López Moreno, Mario Casasús, Elsa Cano, Patricia Zama, Raúl Hernández Viveros, Citlali Ferrer, Francisco Turón, Dalia de León Adams, Martha Chapa, Dámaso Murúa, MAC, Por supuesto, Carlos Bracho, Miguel Bautista, Francisco Carranza Rolmero y René Avilés Fabila sobre Fernando Sánchez Mayáns.
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